Formarse desde la trinchera: jóvenes apuestan por talleres y cursos especializados en comunicación y medios
- jorgeomarsanchez9
- 14 jul
- 3 Min. de lectura

Por Redacción
La cámara está encendida, el micrófono en posición, y la claqueta marca la tercera toma. El grupo de jóvenes en escena no proviene de una universidad tradicional, sino de un taller intensivo de producción audiovisual impartido por un cineasta en activo. Y esa escena no es una práctica: es una producción real para una campaña digital.
Así se ve la nueva forma de aprender de muchos jóvenes en México y América Latina: aprendizaje práctico, directo, actualizado y fuera del esquema universitario tradicional.
El cambio de paradigma: del aula al set
Durante décadas, estudiar comunicación, cine o periodismo significaba ingresar a una universidad y cursar una carrera de 4 a 6 años. Hoy, cada vez más jóvenes están optando por formaciones cortas, intensivas y con enfoque 100% práctico, muchas veces guiadas por profesionales que están activos en el medio.
Talleres de locución con conductores de radio, cursos de guion con cineastas independientes, diplomados de contenido digital con youtubers exitosos, o clases de periodismo impartidas por reporteros de campo. La tendencia está clara: los jóvenes quieren aprender de quienes ya están donde ellos quieren llegar.
"Elegí un taller de producción con una directora de documentales. Aprendí más en tres meses que en dos años de teoría en la universidad", comenta Raúl Gómez, de 21 años, quien hoy trabaja como editor freelance para plataformas de streaming.
Velocidad, especialización y realidad
En un mundo donde los cambios tecnológicos, las plataformas y los formatos evolucionan a gran velocidad, muchos jóvenes no quieren esperar. Buscan conocimientos relevantes, aplicables y actualizados, no planes de estudio obsoletos.
Además, valoran la especialización. No quieren cursar materias que sienten innecesarias. Prefieren tomar talleres de edición, storytelling, guion de contenido viral, producción de pódcast o dirección de cámaras móviles.
"Quiero producir cine, no entender teoría semiótica durante cuatro semestres", dice con franqueza Lissette, quien tomó un diplomado de cine independiente en una escuela alternativa en Guadalajara.
Los profesionales como maestros
Una de las razones más poderosas detrás de esta tendencia es el contacto directo con los profesionales del medio. No se trata solo de aprender técnicas, sino de absorber la experiencia, los errores, las redes y las realidades del campo.
“Mis alumnos me preguntan cómo cobro una producción, cómo consigo clientes, cómo trabajo con influencers… Eso no lo enseña ningún libro”, dice Elena Ríos, productora audiovisual que imparte talleres en línea desde su estudio.
Este enfoque permite que el aprendizaje no solo sea más rápido, sino más humano, más honesto y más orientado a la acción.
🎙️ Voces jóvenes, historias reales
🎧 Valeria Méndez, 22 años
Estudiante de un taller de podcast en Querétaro
“Estudié dos años de Comunicación, pero todo era teoría. Me metí a un curso de pódcast con una periodista de radio y en tres semanas ya había lanzado el mío. Me escuchan desde cinco países y ya tengo dos patrocinadores locales”.
🎬 Luis Alberto Cortés, 19 años
Alumno de producción en SAE Institute
“Mi generación no quiere esperar cinco años para que nos dejen tocar una cámara. Aquí, desde el primer mes ya estás grabando, editando y entregando productos reales”.
🎥 Daniela Ríos, tallerista de cine independiente
Directora del taller Cine Exprés en Guadalajara
“Prefiero compartir lo que he aprendido en rodajes reales. No hay nada más formativo que producir con recursos limitados y creatividad ilimitada”.
¿Y la universidad? ¿Sigue siendo necesaria?
No se trata de una guerra entre lo académico y lo práctico. Muchos jóvenes aún valoran la universidad, pero ven los talleres como un complemento o, en algunos casos, una alternativa real. En especial, aquellos que no tienen los recursos para pagar una carrera completa o que desean insertarse rápidamente en el mercado laboral.
Escuelas como CCC, SAE Institute, UVM, CEFAT, Centauros Films o incluso plataformas como Domestika, Crehana o Platzi, han capitalizado esta tendencia ofreciendo formación enfocada en resultados.
El conocimiento se mueve. Y los jóvenes también.
La nueva generación de creadores de medios no quiere esperar. Quiere aprender, producir, equivocarse y crecer al mismo tiempo. Y lo está haciendo desde talleres, cursos, bootcamps y diplomados con los pies en la tierra y los ojos puestos en la pantalla.
El talento está ahí. Y ahora, más que nunca, la formación va al ritmo de la pasión.





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